Bs As, Capilla del Señor, San Pedro, Rosario, Aldea Brasilera, Paraná

20.07.2013 00:00

Llegó el día!!! El 29 de junio, partimos, después de un asado-despedida con primos, tía y amigos… Gracias por el GPS y el papel, y sobre todo, por la buena onda… todo nos vino bárbaro!

 

Paramos cinco días en Capilla del Señor, donde nos volvimos a quedar encajados en el barro y otra vez necesitamos un tractor para que nos saque…  (Parece que Capilla no quisiera dejarnos ir-  aja )

De Capilla del Señor a San Pedro:

Recorrimos y disfrutamos de la ciudad de San Pedro. Donde Ale y Pablo nos recibieron, nos llevaron a pasear  y nos mimaron un par de días…

Y hasta nos hicieron de guía en Rosario y nos invitaron una merienda en la “mesa de los galanes” del  bar El Cairo.


Rosario siempre estuvo cerca….

Sobre todo ahora que los dos campeones de este año son de acá: Rosario Central ganó holgadamente el campeonato de la B y ascendió a la A. Y Newels Old Boys, ganó el Torneo de 1ª A del fútbol argentino!!!

El tiempo no nos acompañó en Rosario, casi no vimos el sol en 10 días, pero paseamos y conocimos un montón.

El monumento a La Bandera:

 

La Municipalidad y las peatonales

 

Recordando a Roberto Fontanarrosa

                                                                                          

    

   Y comiendo en los carritos de La Florida

 

Amigas inseparables, dentro y fuera del pegaso…

 

Con Emiliano, un rosarino genial, un ángel que nos cuidó y se preocupó porque estuviésemos de lo mejor. Incluso cuando nos olvidamos toda la noche las luces del pegaso encendidas y obviamente, nos quedamos sin batería… Tardamos 3 días en poder volver a arrancar. Lo que nos sirvió de excusa para seguir equipando y acondicionando el pegaso (luces y fusibles de repuesto, cargador de baterías, un espejo retrovisor nuevo, etc. y hasta un horno que no teníamos…)

 

El lunes 15 de julio, despidiéndonos de Rosario, Santa Fe y camino a Victoria, Entre Ríos

 

Victoria es llamada “la ciudad de las 7 colinas”… Es muy bonita, tiene casi 50.000 habitantes, construcciones muy antiguas y pintorescas, y un casino increíble.


 

Pero lo que más nos maravilló fue su Iglesia:

 

Es la primera vez que nos pasa… nos fuimos antes de lo planeado, no nos sentimos muy cómodos en Victoria. Desde el policía que guitarreaba con cosas que no tenía ni idea y nos corría de todos lados, hasta los perros de la calle (en muy mal estado) que se querían comer cruda a Nany en todas las esquinas. A la noche comimos una boga asada espectacular en un restaurante del puerto, pero la atención fue siempre a cara de perro  ¿?

 

El 16 de julio, ya casi de noche, paramos a dormir en “Aldea Brasilera”. Un mini pueblito ubicado a 19km de la ciudad de Paraná. En total tiene 1500 habitantes, descendientes de alemanes. Un lugar donde todo el mundo camina por la calle con una sonrisa, saludando a quien se cruza, conocido o desconocido. Donde los niños caminan solos por la calle, van solos a la plaza y al cole; los niños y los perros son de todos. Los autos dan prioridad a la gente. Un lugar donde nos recibieron con los brazos abiertos y donde vinimos a pasar una noche, solo de pasada y quisiéramos quedarnos a vivir.  Dos días hermosos, súper relajados, hasta el tiempo fue bárbaro.

18 de julio.  Llegamos a Paraná, es hermoso!!! Solo que a los pocos minutos, en una subida en Parque Urquiza rompimos el cardán.

Ahí donde estábamos, un vecino nos acomodó unos metros con una topadora porque estábamos cortando el tránsito, pero pasamos ahí 30 hs… con una vista espectacular del río y el parque, pero muertos de frío… Hasta que el mecánico pudo terminar de repararlo. Nuevamente los vecinos y gente que justo pasaba por ahí cuando se rompió el pegaso se acercaron a la noche a preguntar si necesitábamos algo y nos dejaban la dirección de sus casas para que les tocáramos el timbre a cualquier hora…  El mecánico, Federico: 11 puntos!!!